El hecho de que la Giralda es, a excepción de la reciente Torre Pelli, el edificio más alto de la ciudad de Sevilla, condición por la que la Unesco declaró a la capital hispalense como Patrimonio de la Humanidad, hace que los privilegiados que dispongan de un ático en esta ciudad, cuenten con unas maravillosas vistas en las que contemplar, incluso desde la distancia, las construcciones más altas de la ciudad desde la mencionada Giralda, hasta la torre del puentes del Alamillo. Como digo, todo un privilegio.
Así es, contar con un ático en Sevilla tiene múltiples ventajas que van más allá de las vistas, algo que depende más bien de la altura del edificio en cuestión y del entorno en el que se encuentre, y que hacen que este inmueble tenga un valor añadido que no tienen otras viviendas. Un ático cuenta mucha luminosidad y en una ciudad como la capital hispalense, una de las localidades con más horas de luz al año en Europa, nos permite gozar de gran cantidad de luz natural lo que proporciona sensación de amplitud en las habitaciones, facilita la decoración y disminuye el uso de iluminación artificial.
Cabe apuntar que el hecho de que muchos de los áticos del mercado inmobiliario hispalense cuenten con terraza hace que sus moradores puedan disfrutar de mucho tiempo al aire libre, creando un agradable espacio con plantas, tumbonas, hamacas, que además ofrece intimidad y privacidad. Así, sólo el vecino de otro edificio de altura similar puede reducir la privacidad de un ático, algo que se evita fácilmente con plantas o pequeñas vallas.
En suma, los áticos constituyen un activo exclusivo, dada su escasez en el parque inmobiliario global, por lo que tener un ático da un cierto toque de distinción y eso conlleva a que la adquisición de uno sea una buena inversión. De hecho, su escasa oferta mantiene siempre al alza su demanda, por lo que son inmuebles codiciados y atractivos.
De esta manera, si quieres vender tu ático en Sevilla, debes saber que cuentas con un activo interesante y que tiene su demanda en el mercado inmobiliario pero, además, sería bueno atender a una serie de consejos y recomendaciones para facilitar esa venta y que esa transacción sea lo más fructífera posible.
Lo primero de todo es ser transparente con nuestros posibles compradores. Por ello, debemos especificar cuantos metros cuadrados tiene, y cuales son habitables, si tiene o no terraza, y qué cantidad de espacio ocupa, su orientación o los sistemas de climatización presentes. Igualmente, si nuestro ático es el único camino para acceder a las azoteas donde se encuentran las antenas colectivas, los contadores o las instalaciones de fibra de los demás vecinos, es una cuestión que también debemos notificar.
Referenciar a la perfección la zona en la que se ubica el ático, ya que no es lo mismo que el ático esté ubicado en el casco histórico y es el punto más alto de la zona y ofrece grandes vistas a monumentos y lugares emblemáticos que en Nervión rodeado de edificios más altos que entorpecen la vista y la luminosidad y restan privacidad. Asimismo, es una información muy útil y valiosa para posibles compradores si el ático está en una calle principal o si tiene servicios próximos como restaurantes, bares, farmacias, colegios, guarderías, etcétera.
Trabaja el factor estético. Ya lo dice el dicho, una imagen vale más que mil palabras así que hay que considerar la posibilidad de llevar a cabo pequeñas reparaciones o retoques estéticos en el ático para que los posibles compradores, a la hora de visitar el inmueble, se lleven una grata impresión. En esa línea, una vez que tengas la vivienda en óptimas condiciones, aprovecha para sacar varias fotos del inmueble y luego elige las mejores con ayuda de profesionales como apoyo visual para posibles anuncios.
Marca un precio acorde con la zona en la que está el inmueble, tomando de referencia aquellos que se han vendido en menos de un año y no descartes una ligera rebaja. De hecho, portales especializados como Idealista señalan que si durante los tres primeros meses no consigues más de 20 personas interesadas en verlo es que te has equivocado en el precio.
Por último, utiliza la empatía, es decir, ponerte en la piel del comprador. Una buena idea es ir a visitar (o en su defecto investigar) otros áticos en Sevilla similares al tuyo, así podrás hacerte una idea más aproximada de contra quién compites en el mercado.