Como ya sabes, en este blog hemos analizado como todas las transacciones y operaciones inmobiliarias conllevan una serie de aspectos legales y judiciales. Estos aspectos, deben ser acatados y cumplimentados por las partes contratantes. Esas implicaciones legales, forman el derecho inmobiliario y garantiza que la transacciones inmobiliarias se ajusten a la legalidad vigente. Como ya he comentado, es de gran utilidad contar con asesoramiento legal a manos de profesionales: los abogados expertos inmobiliarios.
La figura de estos profesionales del asesoramiento legal del derecho inmobiliario, cobra gran relevancia en la actualidad. No sólo, como se ha podido ver en el Asesoramiento jurídico inmobiliario ¿Existe? ¿Qué es? Por garantizar la seguridad jurídica de la transacción inmobiliaria y evitar desagradables sorpresas no previstas sino también por otras labores fundamentales que se van a desglosar a continuación.
Pero antes qué nada, cabe responder a la pregunta ¿Cuáles son las características profesionales que tienen los abogados expertos en temas inmobiliarios para ser considerados como tal? Pues se trata, por lo general, de juristas especializados en derecho contractual e inmobiliario. Estos, han desarrollado su carrera profesional en asuntos relacionados con este sector. Ejercen como intermediarios en la contratación o resolviendo con éxito cuestiones a solucionar tanto en vía judicial como en vía extrajudicial.
Es por ello, que estos profesionales están capacitados para estudiar la legalidad de la transacción inmobiliaria a acometer. Valoran si existe algún tipo de riesgo en la operación, negociando el contrato pertinente ya sea de arras o de compraventa y ofreciendo el mejor asesoramiento posible en cualquier situación relativa a la operación inmobiliaria en la que su cliente tenga ciertas dudas.
Asimismo, los abogados expertos en temas inmobiliarios tienen como funciones primordiales el estudio de la situación del inmueble objeto de la transacción, investigando la información en el Registro de la Propiedad, si tiene cargas y gravámenes, su situación urbanística, etcétera; la resolución de disputas sobre urbanismo relativas al inmuebles y como no, el asesoramiento al cliente en contratos, documentos, informes periciales, reclamaciones así como en procedimientos judiciales relativos al inmueble de diferente tipología como por ejemplo herencias, hipotecas, desahucios, separación de bienes o indemnizaciones a causa de incumplimientos contractuales o de responsabilidad civil.
Pero donde más se frecuenta la experiencia profesional de los abogados expertos inmobiliarios es en la compraventa de los inmuebles. En este sentido, la labor más ‘convencional’ del abogado es, como ya se ha expuesto, comprobar todos los aspectos jurídicos y técnicos relativos al inmueble. De esta manera, el objetivo del letrado es conducir las acciones de sus clientes para que la venta o adquisición de un bien inmueble se lleve a cabo con total seguridad jurídica así que en supuestos en el que el cliente se encuentre en situaciones que intenten vulnerar la ley, sea por desconocimiento o por la presencia de dolo, el cometido del abogado debe ser en todo momento reconducir la situación y guiar a su cliente para no vulnerar la legalidad.
Normalmente, la contratación del abogado por parte del comprador de un inmueble suele producirse a posteriori cuando, por poner un ejemplo, se desea hacer una reclamación por defectos constructivos que afectan a la habitabilidad, funcionalidad o seguridad de la vivienda y que vulneran el Código Técnico de Edificación. Es en este caso cuando entra en juego otra de las principales funciones de los abogados expertos inmobiliarios la de reclamación judicial y la elaboración de un informe pericial para lograr que las posibilidades de éxito en una conciliación o en un proceso judicial sean muy elevadas.
Pero el campo de actuación de estos profesionales no es sólo la compraventa de inmuebles, sino también ejercen su asesoramiento legal en el arrendamiento siendo el que gestiona la reclamación de rentas y otros incumplimientos derivados del contrato de alquiler o indicando ciertas cuestiones desconocidas para sus clientes como, por ejemplo, que sólo se necesite el consentimiento de un copropietario, en el caso de una propiedad múltiple, para que ésta se arriende.
En otro orden de cosas, los abogados expertos en temas inmobiliarios son fundamentales en asuntos de leasing inmobiliario. El llamado leasing inmobiliario se trata de una fórmula de financiación que permite a las empresas hacerse con un inmueble sin necesidad de firmar una hipoteca mediante la petición a un arrendador financiero que compre y se lo arriende con una opción de compra al final del contrato que será ejercida por la empresa. Así, en esta novedosa forma contractual, el letrado inmobiliario será el encargado de mediar entre ambas partes, velar por el cumplimiento del contrato y gestionar elementos que vayan surgiendo de este arrendamiento como el impuesto de plusvalía.